POLÍTICOS DE SALDO

Cada vez que pongo en marcha la televisión para ver las noticias mientras como, se destaca alguna noticia sobre las medidas del gobierno tras la crisis o cualquier otra cosa en la que unos políticos hablan y los otros siempre contradicen o atacan las palabras y decisiones de los anteriores. Para mí resulta vergonzoso ver este comportamiento infantil en personas como las que ostentan los cargos públicos para representar y defender los derechos de los ciudadanos. Se parece más a los “reality show” en los que la gente vulgar se estira de los cabellos o dice palabras groseras sin ningún tipo de compostura, sólo para atraer la audiencia de personas como ellas o de otros que miran estos comportamientos con sorpresa y curiosidad.
Digan lo que digan, por lo que a mí respeta como ciudadano, debo decir que tras de estos últimos veinte años, haya tenido la dirección cualquiera de los partidos políticos que han conducido el gobierno, he tenido la suerte de vivir igualmente bien; he tenido trabajo, he pagado impuestos, me he podido comprar un coche, he podido comer sin ningún lujo, tengo una casa,... Y si alguna vez he ido al médico, también me han tratado de la misma manera. Es decir, no he notado gran diferencia con respecto a quien llevaba el gobierno. Obviamente han subido los precios de la gasolina, la comida o la vivienda, pero en otros países ya tenían estos precios antes de que nosotros, de la misma manera que también hay donde aún están mucho más bajos. Pero todo esto forma parte de una economía mundial gobernada por intereses y deseo de mayores riquezas, que al fin y al cabo, debemos pagar los trabajadores comunes, e incluso los políticos, a pesar de que ellos tienen mucho mejor sueldo o ciertos privilegios.
Así que desde mi posición, no acabo de entender estas peleas por el poder y las acusaciones que se hacen. Pienso que sean del partido político que sean, todos ellos deben trabajar para defender los derechos de los ciudadanos, denunciar posibles abusos de poder, buscar soluciones a los problemas, etc., es decir, trabajar conjuntamente por el bienestar de todos, sin afán de protagonismo ni de llenarse los bolsillos. Y como personas dentro de este status social, no forman parte de un “reality show” sino de la seria responsabilidad de conducir un país y más en estos tiempo de crisis. Si así fuera, merecerían mi respeto y atención, pero si no son capaces de hacerlo, quizá les resultaría mejor cambiar de oficio para poder estirarse de los cabellos sin ningún tipo de censura, pero tampoco creo que se les diese demasiado bien y las cadenas de televisión no tendrían la misma audiencia.