PODRIDO DE DINERO

Tener dinero quizá es la cosa a la que todo el mundo aspira. Todos quieren tener mejor casa, mejor coche, más lujos y comodidades, quizá pensando que así serán mejores, más admirados o reconocidos; todos desean que les toque la lotería y tener dinero suficiente como para no tener que preocuparse de nada más en esta vida y ni tan siquiera tener que trabajar. Siempre se dice que el dinero no da la felicidad, pero todo el mundo lo desea, quizá porque también se piensa que con dinero, todo se puede comprar, parece que incluso la salud, la amistad y el amor.

Así, hace poco volvió a salir en las noticias el listado de las personas más ricas del mundo y me pregunto, ¿porqué quiere una sola persona tener tanto dinero?. ¿Qué tiene el dinero que todo el mundo lo desea y quiere pero que nunca es suficiente?. Y porque hay gente que tiene tanto y gente que tiene tan poco, que ni tan siquiera tiene lo necesario para comer.

En otro programa vi como viven algunos de los hijos de estas personas multimillonarias de nuestro país y que no obstante, no llegaban a estar en la lista de los más ricos del mundo. Estos acababan por no valorar nada, siendo unos consentidos y unos prepotentes; incluso vi un matrimonio que le daban seis mil euros al mes como paga para su hija, que no sabía ni lo que era una hipoteca o tener que trabajar, y esta lo gastaba casi todo en cirugía, total, ya ves con qué resultados, porque como hombre, no me parecía nada atractiva, es más, resultaba verdaderamente repelente.

Saber de la existencia de personas con tanto dinero que nunca podrán llegar a disfrutar de todo ello y otros tan abandonadas en el mundo, sin lo necesario para beber agua limpia, tener las atenciones médicas necesarias o poder comer varias veces al día en una casa que no pueda llevarse el viento o en la que no sufrir frío ni humedades, o poder pagarles juguetes, ropa o estudios a los hijos... me parece una gran injusticia y una de las mayores muestras de egoísmo del ser humano. Pero quizá lo peor de todo, es que todos les aplauden; todos les admiran; todos quieren vivir como ellos y eso me parece preocupante.

Pienso que una cosa es tener dinero suficiente como para vivir muy bien, desahogadamente y con cierta tranquilidad; es más, mucha gente se lo merece por sus sacrificios y trabajo, habilidades y dedicaciones, pero una cosa muy diferente es tener más y más, tanto que no se gastaría en esta y otra vida y ni con una familia numerosa, e incluso llega a perderse la cuenta de la fortuna que se tiene.

Creo que de alguna manera, habría que limitar así la concentración de tanta riqueza en una sola persona, familia o empresa, de manera que se les obligase a invertir o contribuir en la mejora social. Quizá así podríamos tener más puestos de trabajo, menos pobreza... y vivir en un mundo un poco mejor.